El Gobierno en el Exilio (GE) seguirá una estrategia escalonada para alcanzar el reconocimiento internacional, basada en legitimidad, operatividad y utilidad política. Primero, construirá una estructura institucional sólida, funcional y jurídicamente fundamentada, con representación ciudadana y control democrático. Luego, desarrollará acciones concretas en defensa de los derechos del pueblo cubano, como la gestión de documentación para refugiados, litigios contra el régimen en cortes internacionales y asistencia directa a presos y opositores. A medida que gane credibilidad y autosuficiencia, establecerá relaciones diplomáticas informales con gobiernos, parlamentos y organismos multilaterales, y finalmente presentará su caso formal ante instancias como la Corte Internacional de Justicia, siguiendo tácticas jurídicas concretas y respaldado por precedentes legales, legitimidad de origen y apoyo ciudadano verificable.